El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Sonora destaca que poner un alto a tiempo al consumo de alcohol y tabaco, puede evitar que se detonen enfermedades crónico-degenerativas en mujeres y hombres.
En los casos detectados en menores de edad, el IMSS mantiene un convenio de colaboración con otras instituciones de salud, como el Centro de Integración Juvenil, donde se brinda asesoría, además de dar pláticas programadas en las Unidades de Medicina Familiar (UMF); mientras que en el caso de adultos, el apoyo se ofrece en el Hospital Psiquiátrico “Carlos Nava”.
El coordinador clínico de Educación e Investigación en Salud, del Hospital General de Zona (HGZ) No. 2, en Hermosillo, Jorge Luis Santiago Córdova, dijo que el consumo habitual de ambos productos incrementa los riesgos de padecer problemas de salud.
“En el caso del alcohol, de la insuficiencia hepática, si está en sus fases iniciales o intermedia, la primera indicación es suspender el consumo del tóxico, ya sea tabaco o alcohol; si se detecta a edades tempranas, se puede retrasar la progresión de la enfermedad y evitar la cirrosis”, explicó.
El médico internista detalló que el alcohol favorece el desarrollo de cirrosis hepática o, dicho de otra manera, el etilismo favorece la insuficiencia hepática, y con ello el hígado se vuelve más pequeño, deja de producir plaquetas, proteínas y pierde el control del colesterol.
Santiago Córdova expuso que el tabaquismo es un factor de riesgo para la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), que abarca la bronquitis crónica, como enfisema pulmonar.
“La COVID-19 es una enfermedad que afecta al paciente fumador, en comparación con quien no fuma; tiene mayor riesgo de complicarse”, dijo.