El ochenta por ciento de las personas de 25 a 44 años no pueden adquirir una casa, convirtiéndose en una de las principales crisis que atraviesa este sector de la población; el aumento en el precio de bienes raíces y de los insumos en la construcción son uno de los factores de esta precariedad habitacional.
Verónica Mungarro Covarrubias, presidenta de la Cámara Nacional de l industria de Desarrollo y Promoción de vivienda (CANADEVI) señaló que urgen programas de apoyo a subsidios hipotecarios para que las familias tengan acceso a una vivienda digna.
“Lamentablemente un persona que gana un salario mínimo o gana hasta 2, no le alcanza para comprar una vivienda y por lo mismo no se están construyendo estas viviendas, de nosotros haber construido tres mil en el municipio ahorita no llegamos a mil, ni a quinientas”
“La vivienda más económica que se está construyendo anda alrededor de 500 mil, ese diferencial no lo tiene e trabajador, entonces cómo lograr que sí se dé esta coyuntura que ya se está dando en otros estados”
Por otro lado, dijo que el alza en los insumos dejó una pérdida considerable en el ámbito de la construcción, con lo que se tuvo una disminución de 3 mil viviendas al año, por lo que hay un rezago de 14 mil viviendas en el municipio.
“El rezago que hay en el municipio es de 14 mil viviendas, hay 14 mil familias que van a requerir una casa en los próximos años, estamos quedándonos cortos”
“Pero también se incentiva a construcción de viviendas, por cada casa que se construye alrededor de 13 empleos están ahí de forma permanente y treinta ramas de la economía alrededor de la construcción de la vivienda empieza a darse una dinámica diferente, por un lado incentivas la creación de empleos y por otro lado hay más familias que pueden tener un techo digno”
Estos factores en conjunto con la precariedad de sus trabajos formales, como sueldos bajos, pocas o ninguna prestación dijo, causan que los empleados no tengan posibilidad de comprar una casa.
Para éxodo radio, Columba Chávez